jueves, 23 de septiembre de 2010

El Cuidado De La Peluca

El cuidar de tu peluca de una manera apropiada la mantendrá como nueva, atractiva, y cómoda. Para ello, puedes seguir estos consejos:
1. Guárdala.- Cuando te quites la peluca, guárdala en una base para peluca o en una cabeza de maniquí para mantener la forma. No utilices un maniquí de polietileno ya que no permitirá su ventilación. Si se trata de cabello lacio, alísalo o si se trata de cabello rizado, levanta los rizos con un cepillo de alambre o una peineta. Cubre con una red para el cabello que mantenga el estilo sin aplastarlo. Evita dejar la peluca cerca del calor (como radiadores, ventiladores), la humedad (las duchas), o zonas polvosas.

2. Lávala.- La frecuencia del lavado depende de la frecuencia del uso. Generalmente, una peluca debe lavarse después de cada seis a ocho puestas en climas calientes, o después de cada doce a quince puestas en climas fríos. Sin embargo, si eres muy activa, usas mucha laca, o vives en un clima especialmente húmedo o con mucha contaminación, debes lavarla una vez a la semana para quitar el exceso de sudor y suciedad.

La mejor manera de hacerlo: Antes de lavar, alisa la peluca si es lacia (o enchina si es rizada) de una manera suave y uniforme con un cepillo de alambre o una peineta. Añade una capa de champú para peluca o champú para bebé en un recipiente con agua fría (nunca caliente). Sumerge la peluca suavemente, déjala remojar durante dos minutos. Enjuaga bien añadiendo más agua limpia y fría. Quite el exceso de agua apretando delicadamente sin exprimir.

3. Secado.- Después de lavar, apriete cada rizo si se trata de estilos rizados mientras la peluca todavía está mojada. Para los dos tipos de estilos (lacio y rizado), seca con una toalla para quitar el exceso de agua. Deja que la peluca se seque al aire libre en una toalla limpia y seca, o en una cabeza de maniquí o base que permita la circulación del aire. No dejes la peluca cerca de fuentes de calor o directamente al sol. Nunca uses secadoras u otros aparatos de calor en pelucas sintéticas. También asegúrate de no peinar o cepillar una peluca mojada a menos que estés rehaciéndole el estilo. Mientras la peluca se orea, sacúdela periódicamente para secarla más rápido. Una vez completamente seca, dale forma como siempre.

4. El Uso.- Una vez acostumbrada a tu peluca, es fácil continuar con tus actividades diarias. Sólo recuerda evitar impactos de calor, como abrir rápidamente la puerta del horno, si usas pelucas sintéticas.